"Como ciudadanos no sostenemos con participación el voto que emitimos"
Somos argentinos y como tales tenemos un gran defecto: en primer lugar el de quejarnos de todo y por todo, y en segundo el hacerlo ante quien/es no pueden resolver el problema y por lo tanto nuestra idiosincracia es continuar quejándonos hasta que la muerte nos separe.
Pareciese como si en realidad algo que debería ser un medio se convierte en un fin. La queja no es mala, el estar en desacuerdo con algo ó alguien no es malo; lo que sí está mal es hacerlo por hobby sin esperar una solución a cambio, y la solución no aparecerá por obra y magia del Espíritu Santo sino más bien por obrar en el marco de las instancias que correspondan a cada caso.
Tenemos que aprender a elevar nuestras peticiones directamente hacia quienes son el medio para resolverlas, porque ... de eso se trata: RESOLUCION DE PROBLEMAS, CHAU QUEJAS.
Este año tendremos una vez más, gracias a Dios, la posibilidad de emitir nuestro voto de confianza hacia quienes creemos que serán nuestros mejores representantes dentro del organigrama estatal.
Votemos con convicción, votemos con confianza, votemos; pero también acompañemos nuestro voto participando desde nuestro lugar, aportando lo que creemos necesario para que las cosas que sostenemos no están del todo bien comiencen a cambiar.
Una gota de agua parece nada... varias gotas de agua revalsan un vaso. Recuerda que lo que pareciese que solo a vos te aqueja puede ser motivo de aflicción de muchas personas que tal como vos están preocupadas por el mismo tema.
No dejes de expresarte, pero cuidado, siempre ante quien corresponda y con las instancias pertinentes, porque solo así hallarás la solución.
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